martes, 16 de marzo de 2010

No escarmiento

Madrugada del domingo al lunes. Noche de Oscars. Mañana no me esperan en el trabajo. Televisor encendido y, al alcance de la mano, frutos secos, chocolate y coca cola, poniendo de manifiesto que en materia de sustancias excitantes me quedé anclado en los once años. Comienza la gala con los diez nominados a actores principales en el escenario, recibiendo una sonora ovación (al parecer, los secundarios no se merecían el homenaje). Ahora Neil Patrick Harris inicia la gala con un vistoso número musical ¿quiere eso decir que va a ser una gala amena, con meritorios números cómico-musicales? (spoiler: No, no lo fue). Steve Martin y Alec Baldwin descienden de los cielos como en un número de Busby Berkeley y cumplen – solo eso – su función. Ya empieza el asunto: Penélope Cruz (¡qué guapos salimos los bebés del 73!) entrega el Oscar secundario a Christoph Waltz por Malditos Bastardos. Merecidísimo. Una pena que no se puedan dar dos, porque Christopher Plummer lleva cincuenta años haciendo las cosas muy bien, su Leon Tolstoy tiene una pinta estupenda y no parece que vaya a seguir mucho más tiempo en activo. Oscar de Película de Animación para UP, naturalmente, solo sus diez primeros minutos ya merecen un Oscar. Mejor Canción… ¿no las cantan este año? Gana una canción country que tiene una pinta aburreovejas que da miedo. Mejor Guión Original y empiezan a sangrar mis llagas: podía haber ganado Malditos Bastardos - irreverente, juguetón, gozosamente brutal- , o UP – que trasciende los límites de su género y conquista al público adulto – o Un Tipo Serio – que está escrito por los Cohen y con eso ya está todo dicho - , pero gana En tierra Hostil: un guión tan complejo como el de la carta de ajuste. Ahora viene un homenaje larguíiiiisimo a un señor que se ha muerto y cuyo mayor mérito fue producir Solo en Casa. No lo entiendo. Sigue la gala. El corto granaíno La Dama y La Muerte pierde frente a la más tediosa y cansina de sus competidoras. Ahora sale Ben Stiller disfrazado de extraterrestre de Avatar (alguien iba a hacerlo, era ineviteibol) y el malaje de James Cameron finge (mal) que le hace gracia. Ahora toca el Guión Adaptado. Up in the Air y Precious eran mis favoritas, así que bien por Precious. Y seguimos adelante. En un claro desprecio a las viejas glorias (pero ya llegareis a viejos, brillantes productores televisivos) este año los oscars honoríficos no se entregan en la gala, sino en un acto días antes, del que ahora pasan un brevísimo video. Pero, al fin y al cabo, quién es Lauren Bacall para que le dediquen dos minutos de directo en prime time… En fin, seguimos. Robin Williams, ese actor desperdiciado por sí mismo, entrega a Mo’nique el Oscar a actriz secundaria por un papel por el que cualquiera mataría. Ahora dan muchos premios técnicos y de vestuario y esas cosas y salen al escenario muchas estrellitas juveniles que serán barridas por el viento antes de que tengan edad para comprar alcohol y me voy quedando dormido y sueño que vuelvo a ver la horripilante nueva versión de Sherlock Holmes y me despierto aullando y bañado en sudor… y sigue la gala con un video homenaje al cine de terror que mezcla, sin temor a consecuencias penales, El Resplandor con Viernes Trece (claaaaro por esto no le podían dar a Lauren Bacall el Oscar en Directo…¡Malditos Bastardos!). La nieta anoréxica de Demi Moore … ah, no, perdón: Demi Moore herself presenta el video homenaje a los fallecidos este año: Jean Simmons, Jennifer Jones, Karl Malden, un puñado de buenos guionistas de la era dorada, Michael Jackson …¡anda!¿Se ha muerto?... Ahora un número de baile espectacular al son de las bandas sonoras nominadas. Gana UP, yo me alegro y a James Camerón se le va acentuando peligrosamente la cara de vieja desdentada. Película Extranjera: A Almodóvar se le ve sinceramente feliz de leer “El Secreto de sus Ojos” en la tarjeta con el nombre del premiado. Y yo también feliz. Y cualquiera que haya visto esta o cualquier otra película de Campanella. Para el premio a actor principal, cinco colegas glosan los méritos de los cinco actores nominados. Resulta muy emocionante y probablemente lo mejor de la gala, lástima que, de nuevo, los secundarios no merezcan este honor a juicio de los organizadores. Gana Jeff Bridges, consiguiendo así el Oscar casi cuarenta años después de su primera nominación (éste record creo que sólo lo supera Henry Fonda) y refrendando una carrera intachable. Bien por él…Pasa un rato, he debido dormirme de nuevo y he tenido uno de esos sueños absurdos: Sandra Bullock ganaba un Oscar, je, je, qué tontería: Antes lo tendrían Deborah Kerr, Sigourney Weaver, Glen Close, Michelle Pfeiffer y mi vecina del bajo que da de comer o todos los gatos del barrio. Con Mejor Dirección y Mejor Película seré breve: Lo único bueno de que gane la cosa esa hostil es que no gana Avatar, que no he visto y que no creo que vea porque fuentes de toda confianza me aseguran que no es más que “Pocahontas en Pitufolandia. Y Cameron me debe todavía las quinientas pesetas que me timó con Titanic. Y me acuesto de amanecida con dolor de estómago por el atracón de chocolate y por la creciente sospecha de que lo de Sandra Bullock no lo he soñado. Y el año que viene haré lo mismo. No escarmiento.
Un post pelín largo, lo se. Pero mi nuevo portatilillo chiquinino (o Net Book, que dicen los entendidos) es la caña: parece que escribe sólo.

1 comentario:

Alejandro Colera dijo...

¡¿El salón de tu casa?!

Nunca pensé que decorarías de dorado tus sillones, y mucho menos mi querido hermano, que cobres a tu familia por un refrigerio.

¡Bien por la Bullock!. Actriz de la que recordamos maravillosísimas películas de temática social. Con suerte utilizará su oscar para promocionar su próxima peli. Ya lo estoy viendo:
El ganador de un Oscar: Michael Caine.
La ganadora de un Oscar: Sandra Bullock.

MISS AGENTE ESPECIAL 3
Misión instituto. El musical.

(Igual hasta sale el hombre lobo depilado ese.)